Por sexto año consecutivo la pileta de la Plaza de Armas de Lima fue la máxima atracción de los visitantes a esta zona del Centro Histórico de la capital, dado que de allí brotó mil 300 litros de pisco –licor de bandera- que deleitó los paladares de miles de visitantes al conmemorar el aniversario patrio y el Día Nacional del Pisco.

En esta oportunidad, la degustación duró tres horas y los visitantes del Damero de Pizarro que tuvieron la oportunidad de acercarse a la plaza principal de la capital, aprovecharon al máximo la celebración que ofreció la comuna limeña.

Desde tempranas horas de la mañana, un collar humano rodeó la plaza de Armas de Lima para degustar nuestro licor de bandera en su tipo quebranta. A las 11: 30 de la mañana, hombres y mujeres de todas las edades, y de diversos lugares de Lima, empezaron la degustación que finalizó a las 3 de la tarde.

Cuatro surtidores de Pisco se apostaron en la pileta, cada uno de ellos conectado con una varilla de cobre a las figuras por donde se vierte el agua cotidianamente para reemplazarla por Pisco tipo Quebranta.

Luis Sanabria, jefe del programa Lima Linda y Servicios Especiales de la comuna metropolitana, dijo que cada año los equipos que se usan para realizar esta actividad se renuevan en su totalidad por medidas sanitarias.

Esta iniciativa es impulsada por la Municipalidad Metropolitana de Lima, en alianza estratégica con la empresa productora de vinos Tabernero y Plaza Vea.

Se calcula que hasta la 9:30 de la noche llegarán más 50 mil personas a la Plaza de Armas de Lima, para conmemorar el Día Nacional del Pisco, que se celebra los cuarto domino de julio.

Fuente: elcomercio.com.pe, andina.com.pe
Una levadura para cada tipo de vino
12:25 | Author: RICARDO G.
El doctor Sakkie Pretorius, managing director de Autralian Wine Research Institute (AWRI) fue invitado a disertar en el seminario sobre Levaduras Seleccionadas, organizado por la empresa Lallemand en Burdeos (Francia) a mediados de junio pasado, al que asistió prensa especializada de todo el mundo.

La conferencia de Pretorius se basó en las nuevas investigaciones llevadas a cabo por el AWRI en base a las conjunciones de componentes de levaduras seleccionadas que permiten incorporar modificaciones a los vinos durante la fermentación, para lograr los resultados buscados por el enólogo.

Esto, teniendo en cuenta que son combinaciones de componentes en las levaduras, y no levaduras modificadas genéticamente.

La huella genética

El material genético básico, la huella genética (genomic) es el foco de la investigación en fermentación en estos días. "Los metabolomics - explicó Pretorius- abarcan todo lo metabólico que un organismo es capaz de producir. Cuando bebemos un vino, lo que bebemos es la conjunción del metabolismo de la uva y de la levadura (metabolon)".

Los estudios científicos sobre los "metabolonics" o diferentes conjunciones metabólicas, han llevado al Australian Wine Research Institute a desarrollar diferentes caminos para ayudar a "dar forma a un vino" en cuanto a calidad, aromas y sabores, mediante la correcta utilización de determinadas levaduras seleccionadas (Saccharomyces).

Cuando hablamos de "carácter" aromático en un vino nos referimos a esto que en la jerga normal llamamos aromas "frutal", "tropicales", etcétera.

"Las levaduras le dan carácter a un vino, pero es la uva la que aporta la estructura básica", aclara Pretorius. Partiendo de allí, puntualiza que las últimas investigaciones sostienen que lo que genera pequeñas diferencias entre un vino y otro es el aporte de los metabolitos (compuestos generados por el metabolismo de los seres vivos), pequeñas partes que vienen tanto de la uva como de las levaduras.

"Existen cientos de componentes que generan diferentes características en el vino, de hecho si bien conocemos algunos de los componentes aromáticos en los blancos - se han caracterizado 14 compuestos con impacto en el aroma- prácticamente no sabemos nada acerca de los componentes aromáticos en los vinos tintos".

La evolución de la Saccharomyces: "hibridación"

El trabajo con combinaciones de levaduras, o desarrollo de cepas, ha llevado a los investigadores a obtener grandes avances en la utilización de determinados componentes para obtener los mejores aromas en un vino.

El doctor Sakkie Pretorius explicó el proceso. La célula madre de una levadura tiene como función transformar el azúcar, el nitrógeno, el fosfato, el sulfuro, el oxígeno y los minerales en Ethanol y Co2. A través de un proceso denominado glycosis los metabolitos secundarios permanecen en forma de ácidos, alcoholes, sulfuros, etc. Mediante la glycosis también se descomponen los precursores de los sabores, denominados terpenos.

La levadura convierte los componentes no volátiles (no aromáticos) en componentes que podemos percibir mediante el olfato.

Todo el proceso se explica a fin de llegar a la conclusión de que en este punto la levadura ha producido más glicerol que alcohol, logrando un efecto contrario al que se espera, ya que el glicerol es positivo para los aromas del vino. Pretorius puntualiza en este sentido que la fisiología de la levadura para obtener lo que se quiere de un vino puede ser manejada.

Con este fin se han desarrollado varios métodos para desarrollar diferentes cepas de levaduras: selección de cepas, evolución direccionada, mitogénesis (mutar componentes), hibridación (técnica de cruza de levaduras) e ingeniería genética (la única técnica utilizada para modificar genéticamente el ADN y lograr los GMOs).

Cómo se trabaja

La cruza o mezcla de levaduras ha logrado excelentes resultados en laboratorio. "Cruzando levaduras podemos satisfacer ciertas preferencias del mercado", explicó el doctor Pretorius.
Por ejemplo, si se quiere obtener un vino con menos alcohol y más frutado, se pueden realizar "cruzas de cepas" de levaduras que le brindan al enólogo las herramientas para lograr lo que desea. Las levaduras así desarrolladas permiten, además, librar a los vinos del exceso de sulfuro de hidrógeno, el H2S, responsable del olor a podredumbre o humedad.

Mediante la inoculación con mezclas de levaduras es posiblem además, sumar al vino componentes que permiten la aparición de aromas a frutos frescos. En el laboratorio han logrado, además, que tres blends de levaduras redujeran 2,7% el nivel total de alcohol de un vino. "Estas combinaciones de levaduras no son mágicas, pero mejoran mucho el producto en la dirección deseada", aseguran los investigadores de AWRI.

Fuente: areadelvino.com, http://www.awri.com.au/
LA CATA: FASE GUSTATIVA
14:57 | Author: RICARDO G.
La fase gustativa es la última, la definitiva, la que termina de decirnos si todo lo que hemos encontrado en las anteriores se concreta en una realidad gustosa y agradable o si no. Los vinos están hechos para ser bebidos, así que es en la boca donde atraviesan su examen definitivo.

Cuando un catador introduce el vino en su boca distribuye el líquido en su interior de forma tal que éste cubra el total de la superficie de su lengua. Esto tiene sentido porque es así como las innumerables sustancias responsables de la transmisión de los sabores en el vino se ponen en contacto con los órganos de percepción del sentido del gusto, las papilas gustativas, que pueden estar especializadas en un único sabor o en varios.

Se distinguen cuatro tipos de papilas:

• Foliadas
• Caliciformes
• Fungiformes
• Filiformes

¿Dónde percibimos los sabores?

Aunque generalmente al probar un alimento obtenemos una impresión global de su sabor, lo cierto es que percibimos los cuatro sabores fundamentales en lugares distintos de nuestra lengua.

• El gusto dulce se percibe en el borde de la lengua, en la punta.
• El gusto salado se percibe en los costados de la lengua
• El gusto ácido se percibe sobre la superficie de la lengua, en las zonas laterales posteriores.
• El gusto amargo se percibe en el fondo de la lengua.

En estas zonas se perciben los estímulos gustativos directos, aunque existe otra vía indirecta, la que en lenguaje de cata se llama RETRONASAL, que es la responsable del llamado RETROGUSTO. Los estímulos que percibimos a través de la vía retronasal son de carácter olfativo –ya los explicábamos antes, tienen que ver con las sustancias aromáticas que la faringe expulsa hacia el nariz- pero afectan de forma radical al gusto del vino. De hecho, es bueno señalar que esos cuatro sabores que acabamos de situar en cada zona de la lengua son los únicos sabores, en sentido estricto, que se perciben en la boca. Cuando hablamos de un sabor afrutado, o de vainilla, por ejemplo, estamos hablando, en realidad, de aromas que se volatilizan en el interior de nuestra boca al aspirar y llegan hasta nuestra nariz a través de la vía retronasal.

En la fase gustativa apreciamos muchas de las carácterísticas que definen a un vino: su graduación alcohólica, su volumen, su cuerpo, sus sabores elementales y la superposición y armonía que se produce entre todos ellos. El sentido del gusto, evidentemente, es fundamental en esta fase de la cata, pero también lo es el sentido del tacto, que nos proporcionará información acerca del peso y textura del vino.

Los cuatro factores fundamentales de análisis del vino en la boca son:

- Astringencia: la suavidad o dureza del vino en la boca.
- Equilibrio: la armonía entre elementos como la fruta, la acidez, el alcohol y los taninos.
- Postgusto: la riqueza de las sensaciones aromáticas que el vino deja en nosotros.
- Persistencia. La duración y mantenimento en el tiempo de esas sensaciones.

Y de todos ellos se extrae un extenso y variado lenguaje que trata de encerrar en palabras lo más claras y precisas posible la sucesión de estímulos que el catador percibe. Algunas muestras de ese vocabulario son adjetivos como: delgado, amplio, aterciopelado, sedoso, redondo, armonioso, nervioso, acídulo, vivo, intenso, etc.

Nuestra boca es una máquina perfecta de percepción de señales sensitivas. No sólo nos da a conocer los sabores de un vino, también reacciona a otros estímulos como el calor y el tacto provocando en nosotros una suma de sensaciones complejas que con la práctica llegamos a catalogar y ordenar en nuestro cerebro. Catar es una ciencia, un arte y un oficio que nunca termina de enseñarnos nuevas sensaciones.

Cada nuevo vino que examinamos al catar es a su vez un examen para nuestra capacidad de percibir y enjuiciar otros vinos. Esto se puede tomar a la tremenda, como una responsabilidad, pero también como un placer y un juego en el que siempre se sigue aprendiendo y disfrutando. Bueno, siempre no. Del mismo modo que nos alegra catar algunos vinos maravillosos que elevan nuestra moral hasta las nubes por ser capaces de apreciar tanta grandeza, hay otros que al catarlos nos dan un serio disgusto. Catar es apreciar lo bueno y lo malo, distinguirlo, describirlo y enjuiciarlo. Es aprender a decir lo que nos gusta y por qué y lo que no nos gusta y también por qué.

Fuente: vinoseleccion.com

Vino del desierto en Egipto
9:00 | Author: RICARDO G.
Verdaderamente la cultura del vino se desarrolla en lugares tan dispares y en sociedades diversas, que no es aventurado pensar que un hilo conductor transcurrió de una civilización a otra favorecido por el producto de la vitis vinífera.

La amplitud abarcada por la explotación de la vitivinicultura en el mundo, genera permanentemente información desde lugares muy diferentes y muchas veces de impensado origen. Esta noticia nos llega a través de la página wine-pages y en ella Tom Cannavan nos cuenta de una experiencia con una bodega en Egipto, concretamente la Sahara Vineyards.

Sostiene Tom que "Karim Hwaidak, propietario de Sahara Vineyards , ha plantado 30 diferentes variedades de uva en un área de 600 acres en el desierto egipcio cerca de El Cairo, con la orientación del enólogo y vitivinicultor español Lluiz José Pérez" .

La historia de Karim, hijo de egipcio y alemana, es interesante. Su formación la realizó en Francia e Italia y volvió a su tierra para cumplir el sueño de un viñedo en el desierto.

De hecho, el clima del desierto no es tan desfavorable para el cultivo de la vid, siempre que se tenga agua suficiente para emplear el riego a goteo. Tom reconoce que en Mendoza mismo, las condiciones de desierto, de días muy cálidos y noches frias, le favorecen a la vid. Agregamos nosotros que la experiencia de Mendoza con el agua es de antología: hay que pensar solamente que en la misma ciudad, que parece ahora un vergel de árboles umbríos y verdes, ningún ejemplar proviene de otro origen que no sea la mano del hombre .

Egipto tiene, históricamente, una tradición en el cultivo de la vid y la elaboración de vinos, aunque se desconoce - hay ciertas especulaciones que expondremos en otras notas - de dónde provino las vitis vinífera que suplantó las plantas autóctonas de la Primera Dinastía que floreciera alrededor de 3.000 años antes de Cristo.

Lo cierto es que Karim ya tiene sus vinos made in Egipto. Son tres productos: Caspar Viognier 2008, Caspar Chenin Blanc 2008 y Caspar Blanc de Noirs 2008 y se apresta a introducirlos en los grandes mercados de Europa.

Fuente: diariodelvino
LA CATA: FASE OLFATIVA
17:11 | Author: RICARDO G.
Para entender su impotancia en la cata hay que saber que el olfato es el sentido que reconoce y clasifica las sustancias volétiles de un vino cuando estas cumplen dos condiciones básicas: estar dotadas de olor y ser solubles en la mucosidad olfativa. ¿Y cómo llegan esas sustancias hasta la mucosa en la cata?

Los dos caminos del vino a la nariz

La vía nasal directa : percibimos los vapores aromáticos que están en la atmósfera en contacto con la superficie del vino al aspirar dentro de la copa. Por eso movemos la copa, para liberar más aromas del líquido al aire. Y por eso la aspiración debe ser intensa: hay que hacer ascender los vapores hasta nuestra nariz.

La vía retronasal : cuando introducimos el vino en la boca el desprendimiento de aromas se multiplica por dos motivos, el primero de ellos es el ascenso de temperatura en el vino al repartirse por el interior de la boca y aproximarse a nuestra temperatura corporal; el segundo es el movimiento al que lo someten la lengua, las mejillas y la faringe. Es la propia faringe la que en el momento de tragar expulsa hacia el interior de nuestra nariz y boca todos esos vapores aromáticos desprendidos por el vino y es entonces cuando nuestro olfato vuelve a procesar las impresiones recibidas en un primer momento.

La percepción e identificación de los aromas son parte esencial de la cata de un vino. Mientras que la información que transmiten los colores es casi siempre parcial y las impresiones que nos trasladará el sentido del gusto se moverá dentro de unos límites bastante precisos, la sensibilidad que posee nuestro olfato es 10.000 veces mayor a la que tiene nuestro sentido del gusto. El buen catador reconoce y cataloga los aromas que percibe para conocer a través de ellos el vino. Su aroma, si sabemos interpretarlo, puede ser un libro abierto para saberlo casi todo acerca de él.





Fuente: vinoseleccion.com

LA CATA: FASE VISUAL
16:24 | Author: RICARDO G.
Lo primero que percibimos de un vino es su apariencia en la copa. Su aspecto es una primera fuente de información para el catador principalmente en lo que se refiere a la limpidez y transparencia del vino y a su color, aunque además de estos hay otros aspectos como su fluidez, la presencia o ausencia de burbujas de carbónico en la copa y la adherencia del líquido a las paredes del cristal que aportan datos sobre lo que luego encontraremos al llevárnoslo a la nariz y a la boca.





Fuente: vinoseleccion.com

QUE ES CATAR?
7:40 | Author: RICARDO G.

Siempre que nos enfrentamos a un producto desconocido, un vino, un queso, un pan, realizamos consciente o inconscientemente una degustación de lo que estamos probando. Así decidimos lo que nos gusta más y lo que nos gusta menos, lo que nos parece apropiado para una hora del día o de la noche y lo que no.

Esa degustación podría ser definida en sí misma como una forma elemental de cata, aunque cuando utilizamos este término vamos un poco más allá. Descartamos la parte inconsciente y tratamos de sustituir el juicio subjetivo por un análisis razonado basado en criterios objetivos.
Catamos para tratar de conocer las cualidades y defectos del producto que se somete a nuestros sentidos (fundamentalmente al olfato y el gusto, aunque no en exclusiva) y al hacerlo le dedicamos por un momento toda nuestra atención, lo estudiamos, lo analizamos, lo definimos, lo juzgamos y lo clasificamos a partir de lo que nos transmiten sus “propiedades organolépticas”, llamadas así porque afectan a nuestros órganos sensoriales.

Existen, por supuesto, distintos niveles. No es lo mismo juntarnos con un grupo de amigos y realizar con ellos una degustación informal y lúdica de un vino que dedicarnos por motivos profesionales al oficio de catar. En cualquier caso, la cata será ese conjunto de métodos y técnicas que nos permitan percibir, identificar y apreciar mediante los sentidos cierto número de propiedades de los alimentos en general y del vino en particular.

La cata de un vino es, por encima de todo, la forma más fiable que tenemos los seres humanos de entender, apreciar y valorar las virtudes y defectos singulares de ese vino. Pero es además un método insustituible de trabajo. La cata está presente en todas las etapas de la vida de un vino.
Pese a los avances técnicos que han llegado a las bodegas y a los recursos con los que éstas cuentan para analizar los componentes químicos de la uva, del mosto y del vino en cada una de sus fases, ninguno de ellos ha sido capaz de remplazar la técnica ancestral de la cata.

Fuente:vinoseleccion.com

Gracias al desarrollo de un proyecto de I+D+i 9 bodegas riojanas han conseguido aumentar hasta en un 79% el contenido más alto de resveratrol obtenido hasta ahora en un vino de forma natural, logrando índices de 25,6 mg/l. El índice más alto detectado hasta la fecha, según datos disponibles en publicaciones científicas, eran los 14,3 mg/l. detectados en un vino húngaro.

· Es importante resaltar que se trata del único vino con un alto contenido de resveratrol logrado de forma natural mediante la aplicación de innovadoras técnicas desarrolladas durante el proyecto ya que existen otros vinos a los que el resveratrol ha sido añadido de forma artificial.

Los vinos desarrollados por 9 bodegas riojanas (Bodegas Bilbaínas, Bodegas Dinastía Vivanco, Bodegas Viña Hermosa, Bodegas Juan Alcorta, Marqués de Murrieta, Bodegas Ontañón, Bodegas Patrocinio, Regalía de Ollauri y Bodegas Riojanas) y las empresas también riojanas Avanzare y Dolmar, ha logrado un hito en la viticultura y enología mundiales. Por primera vez y mediante el desarrollo y la implementación de técnicas naturales, tanto en el viñedo como en el proceso de elaboración, se ha logrado incrementar de forma espectacular la cantidad de resveratrol en un vino, alcanzando valores nunca vistos hasta ahora. Los 25,6 mg/l de este polifenol hallados en los vinos suponen un incremento del 79% frente a los 14,3 mg/l. encontrados en un vino húngaro.

“Los resultados obtenidos, aunque provisionales, abren un campo muy importante de trabajo para la viticultura y enología. Este debe ser el camino a seguir para el vino de Rioja; ofrecer buen producto, con valor añadido respecto a la competencia, procurando desmarcarse de la política de bajo precio, a base de Investigación, Desarrollo e Innovación”, afirman los bodegueros implicados en el proyecto.

A lo largo de todo el año 2008, se ha estado potenciando la producción de cantidades más elevadas de estos polifenoles en viñedos seleccionados de estas 9 bodegas mediante tratamientos físico- químicos y controles y análisis exhaustivos durante todo el proceso vegetativo hasta la maduración de los frutos. Una vez realizada la vendimia en septiembre del 2008 -segunda fase del proyecto- se llevaron a cabo las primeras microvinificaciones piloto hasta obtener los primeros vinos del proyecto, de los que se han obtenido estos espectaculares resultados. Está previsto que en 2010 comience la comercialización de los primeros vinos que se pondrán a disposición del gran público.

“La política de producto saludable es fundamental para el futuro, lo cual implica alejarse del concepto “transgénico, mutación, genéticamente transformado...” y aclarar que nuestro Proyecto es NATURAL de cara al consumidor”.
“Hemos percibido interés y demanda de nuestros mercados en Estados Unidos e Inglaterra, donde creemos que el vino procedente de este proyecto, puede tener un buen futuro”, han asegurado desde algunas bodegas.

Este proyecto es sin duda una fuerte apuesta de las bodegas riojanas por la profundización en el binomio vino y salud, potenciando de forma natural los efectos favorables del resveratrol para patologías cardiovasculares o el cáncer tantas veces descritos en informes y estudios científicos realizados por diversos organismos internacionales y que han sido publicadas por revistas como la Royal Society of Chemistry, American Chemical Society, Elsevier, Laboratoire de Nutrition et Sécurité Alimentaire.

En este caso el alto contenido de trans-resveratrol de los vinos resultantes potenciarán los efectos del consumo moderado de vino para la salud como antioxidante, reductor de los valores de colesterol malo LDL, protector frente a algunos tipos de cáncer, mejora de los niveles de azúcar en sangre, mejora del flujo sanguíneo, propiedades antiinflamatorias, etc. y su consumo siempre moderado constituirá una importante fuente de bienestar.

Para Julio Gómez, Director de Avanzare y Mariano Fernández, Gerente de Dolmar, “el proyecto ha arrojado resultados muy prometedores ya que va a permitir que el consumo y el disfrute del vino aporte beneficios saludables a nuestro organismo”.
”Hemos batido un récord en cuanto a concentración de resveratrol y a partir de ahora debemos seguir trabajando para sacar el máximo partido de lo que hemos conseguido”, han dicho.
Las empresas riojanas líderes en innovación para el sector vinícola, Avanzare y Dolmar, son las encargadas del desarrollo de la parte técnica y científica del proyecto que todavía se encuentra en fase experimental. La empresa Vinomio, experta en la innovación en marketing y comunicación de turismo, vino y gastronomía, trabajará la comunicación del proyecto y el desarrollo de las marcas, junto con las bodegas, durante la fase de comercialización y distribución.

Este proyecto está promovido por el Departamento de Innovación de la Federación de Empresarios de La Rioja con la financiación de la Agencia de Desarrollo Económico del Gobierno de La Rioja. La inversión global del proyecto asciende a 878.000 € de los cuales la ADER subvenciona un 34%.



Fuente: elcatavinos.com
VINO SIN SULFUROSO
5:43 | Author: RICARDO G.

Es una de las bebidas maravillosamente elaboradas en Bolivia y sobre la que poco se conoce y poco se ha escrito. Durante la época de la colonia española, con el auge de la explotación de la plata en el cerro rico de Potosí, los españoles trataron de cultivar vides en los pequeños valles ubicados al sur de este departamento, en condiciones muy adversas propias de la época. Lo que definitivamente resultó más difícil fue la elaboración de vinos, sobre todo el poder conservarlos por mucho tiempo, situación que los obligo a incorporar alternativas para la utilización de la vides producidas en aquellos valles.

La solución a su problema fue la destilación, por muchas razones: primero, porque con la temporada de lluvias era imposible sacar la producción de uva de los valles debido al caudal de los ríos; segundo, que la costumbre de beber vino de los españoles, en aquellas frías alturas de las minas por encima de los 5.000 m.s.n.m., fue cambiando y se inclinó a una bebida mas fuerte con la que pudieran compensar las inclemencias climáticas de la región.

Es de esta manera que al producto destilado en el valle de sinkani, por deformaciones fonéticas de esta palabra, lo conocemos hoy día como singani. Con el correr de los años este producto se dio a conocer en territorio nacional y hoy constituye un verdadero patrimonio cultural en Bolivia.

La materia prima, cuya base es la Moscatel de Alejandría, exclusivamente, representa la base del patrimonio aromático de este aguardiente.
En la elaboración del singani se hace la molienda de la uva, se fermenta con levaduras seleccionadas y con control de temperatura, y no debe pasar de los 19º C – 21º C a efecto de evitar pérdida de aromas por arrastre y volatilización.

Otro aspecto importante es que al ser un viñedo por encima de los 1900 m.s.n.m., por acción de los rayos ultra violetas del sol que está más cercano, hay una mayor cantidad de terpenos (precursores de los aromas) en estado libre, que son asimilados por las levaduras, produciendo vinos de mayor intensidad aromática. Al final de la fermentación se ha conseguido un vino base de alta calidad (con el mismo criterio de los espumantes de la Champagna) que espera pacientemente sus desborres para ingresar a los alambiques, lo mas limpios posible, con la finalidad de evitar que hayan sólidos insolubles y restos de celulosa en suspensión del vino base, que por calentamiento pudieran desprender olores y aromas que afecten la limpidez aromática del singani.

En lo que hace a la destilación se refiere, este proceso no varía de lo tradicional; lo que sí varía son los equipos, ya que hay empresas que cuentan con los equipos Prulho de nueva generación y los tradicionales Egrot, ambos de origen francés.

En la destilación del vino base para la obtención del singani se observan tres facetas:
La cabeza, donde se separan los alcoholes más volátiles, alcoholes superiores, alcohol metílico y aceite de fussel entre los más destacados.

Corazón, que corresponde al alcohol de boca cuyo principal componente es el alcohol etílico asociado a las fracciones aromáticas.

Colas, que son compuestos que tienen mayor afinidad con el agua y cuya recuperación no tiene mayor importancia.

El singani así obtenido constituye la genuina bebida boliviana, que se caracteriza por aromas de Moscatel de Alejandría muy intensos, una graduación alcohólica de 40º GL, persistente en el paladar, con una sensación de untuosidad típica de la glicerina proveniente de la elaboración. Con la destilación, se obtiene un producto de alrededor de 70º y, se ajusta su graduación alcohólica agregándole agua pura.Esta bebida se la consume con jugos de fruta tropical (naranja, mandarina, maracuyá, etc. ) y con Ginger Ale ( Chuflay).

Tipos de Singani

Gran Singani / Singani de Altura
Es el producto obtenido por destilación simple o doble de vinos provenientes exclusivamente de la fermentación alcohólica de la uva Moscatel de Alejandría, producidos en una altura mínima de 1,600 metros de acuerdo al decreto supremo 25569, elaborados, destilados embotellados y/o añejados en las zonas de denominación de origen.

Singani de Primera selección
Es la bebida alcohólica de vinos proveniente de la fermentación alcohólica, de una o varias variedades Vitis vinifera blancas de acuerdo a prácticas enológicas, producidos, destilados y embotellados en las zonas de denominación de origen.

Singani de segunda selección
Es la bebida alcohólica de vinos proveniente de la fermentación alcohólica de orujos no prensados, de una o varias variedades Vitis vinífera, producidos, destilados y embotellados en las zonas de denominación de origen.

Fuentes: www.elpiscoesdelperu.com, wikipedia, vinos de altura.es

La carrera contrarreloj

El imperativo de oxigenar vinos ricos en antocianos libres condena toda intervención tardía y marca el ritmo de trabajo en la bodega. Los diferentes modelos aquí propuestos exigen una gran reactividad de los compuestos fenólicos al oxígeno aportado. Asimismo se debe tener en cuenta que el enorme poder de consumo de oxígeno por parte de las líaas en suspensión (Fornairon, 2000) hace que los vinos puedan ser reactivos de forma natural o bien tras las intervenciones pertinentes (trasiego, centrifugación o filtración). Esta dificultad suplementaria requiere tecnologías adecuadas en vinificación cuando los vinos no se clarifican de forma natural (rendimientos elevados en viña, grandes depósitos, vinificaciones traumatizantes, estados sanitarios, etc.).

La temperatura es otro de los factores limitantes de la microoxigenación, ya que condiciona directamente el conjunto de reacciones de regeneración de los compuestos fenólicos, sin modificar la transferencia de oxigeno aportado lentamente de forma moderada. Así pues, el invierno es tiempo de detener los aportes de oxígeno. Esta detención será definitiva si el vino ya no dispone de suficientes antocianos libres para poder arrancar otra vez en primavera.

El oxígeno en el concepto global de crianza

Aunque la microoxigenación se aplica esencialmente en el marco de procesos tradicionales de crianza para estructurar el vino antes de su estancia en barrica (tipo Rioja, Saint Emilion…), algunos elaboradores toman la opción de la crianza industrial integrando los cuatro parámetros esenciales: lías, oxígeno, madera y tiempo en un esquema parametrable y sobre todo programable. Desgraciadamente, para muchos, oxígeno y madera van sistemáticamente emparejados, pues muchos efectos comunes llevan a confusión.
El oxígeno y la madera actúan de forma diferente sobre el vino con poca, que no nula, interacción. Veamos algunos ejemplos: el enmaderado (barrica o «chips») de un vino tinto oxidado y con taninos secos o, por el contrario, reducido y con taninos verdes no será nunca satisfactorio, del mismo modo como el oxígeno no mejorará nunca un carácter de plancha (trans-2-nonenal) o un carácter quemado (compuestos furánicos) producido por barricas o «chips» defectuosos (procedencia, secado, tostado, etc.)

También hay que lamentar que, en muchos casos, la crianza se concentra sólo en obtener mayor estructura, frutosidad y complejidad del vino, actuando sobre los parámetros oxígeno y madera; se olvida completamente el espléndido recurso natural que constituyen las lías, que debidamente trabajadas aportan la grasa suficiente para armonizar tal estructura y complejidad.

Tanto la gestión del oxígeno, como de la madera y de las lías, provienen de una visión voluntariosa que incluye el concepto de definición de producto. En esta materia es importante partir del producto final para remontar el proceso y no seguir una receta que obliga, a menudo, a llevar a cabo operaciones correctoras a destiempo. Numerosos resultados concluyentes, tanto en América del Sur como en Languedoc (Francia) en el marco de los ensayos dirigidos por la DGCCRF (Direction Générale de Concurrence, de la Consommation et de la Répression des Fraudes) muestran que una gestión con impulso de los cuatro parámetros: oxígeno, lías, madera y tiempo, permite proyectar un buen futuro a la crianza industrial tan sólo tomándose algo de tiempo para desarrollar herramientas como la microoxigenación.


Fuentes:


  • Fornairon C., Mazauric J.P., Salmon J.M., Moutounet M.: «Observations on the oxygen consumption during maturation of wines on lees», International Journal of Vine and Wine Sciences 2000 ; 32 (2).

  • Saucier M.: Tesis doctoral, Université de Bourgogne II, 1997.

  • Patrick Ducornau (revisión de Pablo Ossorio, enólogo de Bodegas Murviedro) ( 28 de julio de 2004 )
LA MICROOXIGENACION EN VINOS TINTOS
15:26 | Author: RICARDO G.
LA VINIFICACIÓN

La primera etapa fundamental en la vinificación es el control de la fermentación. Desde hace muchos años, los investigadores han establecido la necesidad de inducir oxígeno para la multiplicación de las levaduras.

Así pues, la primera aplicación de la micro-oxigenación es la de poder inducir una cantidad conocida de oxígeno durante este periodo. En efecto, el aporte lento en 24 horas garantiza una pérdida nula de oxígeno durante la inyección por lo que es posible inducir, por ejemplo, 4 ml de O2 / litro de vino/ 24 horas sin que esto ocurra. Todos los autores no están de acuerdo con la cantidad exacta de O2 a inducir en fermentación.

LA MACERACIÓN EN LOS VINOS TINTOS

Uno de los dilemas más frecuentes que encontramos en enología es la cantidad de la extracción fenólica, sea jugando sobre la forma y la frecuencia de los remontados o bien sobre la duración de la maceración. En el caso de vendimia muy madura, y de buena calidad, la elección está en general más bien condicionada por el estilo del producto final buscado. Sin embargo, en una materia prima pobre en polifenoles y con falta de maduración hay a menudo una oposición entre el deseo de extraer un máximo de materia colorante y el miedo de resaltar los taninos vegetales de mala calidad susceptibles de no desaparecer jamás durante la crianza.

Después de numerosos años de ensayos en numerosas regiones diferentes, la micro-oxigenación al final de la FA ha sido realizada sobre vinos bajo el sombrero o descubados. En todos los casos, se despeja una constante: tenemos una polimerización taninos-antocianos muy activa que se traduce en un aumento de la intensidad colorante y una evolución del matiz hacia el malva.

Muchas técnicas juegan sobre los mecanismos de extracción. Estos efectos son tanto más marcados si el vino oxigenado presenta una estructura fenólica importante. Una riqueza mínima de 30 I.P.T. parece deseable para valorizar este aporte de O2. Hay que tener en cuenta que el índice de polifenoles totales es un valor muy global que no tiene en cuenta el equilibrio entre todas las diferentes categorías fenicias. Un desequilibrio demasiado importante (falta de tanino o falta de antocianos) puede conducir a un efecto estructurante nulo o una subida de color que será inestable.

Las dosis a añadir en este periodo se adaptan en función de la degustación y se aplican en función a la formación de etanal. La búsqueda sistemática de su presencia no es molesta sino todo lo contrario. El etanal es el punto indispensable en las reacciones de polimerización. La FML y el sulfitado garantizan su desaparición.

Esta aproximación no forma parte de un reflejo natural en el viñedo y todavía menos una práctica enseñada de forma generalizada en las escuelas de enología. Más bien infería hacia parte de viejas prácticas. Muchos vinos tánicos criados en barricas durante 6 meses antes de las tradicionales malolácticas de primavera tomaban estos caracteres de etanal sin por eso mantenerlo después de la FML.

De la misma manera, la reincorporación temprana de vino de prensa (más concentrado que el de gota) antes de la FML con micro-oxigenación es más valorado que una mezcla tardía. En el caso de vinos con falta de estructura es posible incorporar cantidades más grandes. Este aporte tánico va ha permitir reequilibrar la estructura y fijar todo el potencial de antocianos frecuentemente inestables en vinos pobres en taninos. Como en las maceraciones bajo el sombrero, la oxidación controlada favorece las reacciones de polimerización y degradan los caracteres vegetales de los vinos de prensa.

En muchas bodegas que vinifican grandes volúmenes, la rotación de los depósitos de maceración es superior a uno y puede suceder que los tiempos de maceración sean acortados por problemas de espacio. En estos casos la micro-oxigenación permite una mejor utilización de los vinos de prensa que vienen a reequilibrar los vinos procedentes de maceraciones demasiado cortas.
Estas fases esenciales de vinificación son casi indispensables para poder atender las necesidades de la crianza bajo la micro-oxigenación. Esta práctica es aplicable en cualquier tipo de vino tanto como si es destinado a una crianza en barrica como en depósito.

Oxigenación antes de la fermentación maloláctica.

Se ha constatado que microoxigenando antes de la fermentación maloláctica, las ganancias en intensidad colorante y en estructuración del vino son muy superiores, y que el trabajo no representa riesgos considerables. El aporte de oxígeno en un vino tinto estructurado y rico en antocianos libres permite estabilizar a estos últimos con los taninos mediante el puente acetaldehído, bloqueando la evolución tánica, ya que los antocianos fijados en el extremo de la cadena bloquean la polimerización.

Es necesario oxigenar vinos suficientemente equilibrados (antocianos/taninos) para obtener un buen rendimiento de la reacción, pues la oxidación del etanol (reductor secundario) en etanal requiere la oxidación previa de taninos (reductor primario). La oxigenación de un vino desequilibrado por falta de color conducirá a una polimerización sin límite (los antocianos no pueden bloquearla) de los compuestos fenólicos entre sí, provocando sequedad y pardeamiento (Saucier, 1997). Las dosis de oxígeno a aportar están en función de la concentración en compuestos fenólicos, el grado de madurez fenólica y la dinámica de producción y consumo de etanal

Esta fase de estabilización y estructuración entre el final de la fermentación alcohólica y el inicio de la maloláctica dura de dos a tres semanas. En las bodegas donde existe el riesgo de un rápido inicio de la fermentación maloláctica se puede practicar un ligero sulfitado del vino o bien la adición de lisozima que retardan su aparición. Es un trabajo necesario para la buena evolución en barrica de vinos tintos, pues confiere al vino un poder reductor más alto, es decir, mejor resistencia a la oxidación de sus compuestos fenólicos además de estabilizar el color.

Microoxigenación durante la crianza en depósito.

Desgraciadamente existe un elevado número de vinos tintos que no tienen la posibilidad de envejecer en barrica. En este caso, la microoxigenación se presenta como una alternativa. De la misma forma como ocurre en los vinos que envejecen en barrica, el vino criado en depósito también precisa una oxigenación conducida para evolucionar de forma positiva. Los compuestos fenólicos de la uva intervienen de forma mayoritaria durante esa oxigenación, modificando sus cualidades químicas (incremento de peso molecular medio) y organolépticas (disminución de amargor y astringencia). Esta evolución por regeneración comporta modificaciones que es importante traducir a nivel sensorial.

El modelo de conducción a utilizar es diferente al empleado antes de la fermentación maloláctica por varios motivos:
  • Es necesario respetar el nivel de sulfuroso libre aportando dosis menores de oxígeno: 0,5 a 10 mL/L/mes contra 20 a 60 mL/L/mes antes de la fermentación maloláctica.


  • Es necesario seguir la disminución de los antocianos libres que determinarán la calidad de la polimerización.


  • Es necesario evaluar la evolución de otros parámetros del vino (aromas y microbiología) y del medio (temperatura y turbidez).

Durante la crianza el nivel de oxigeno disuelto no debe sobrepasar las 0,03 ppm: sobre este principio diferenciamos la microoxigenación de la oxigenación puntual, también llamada oxigenación violenta (toda operación básica tecnológica que comporta disolución de oxígeno: trasiego, filtración, etc.). Esta ausencia de oxígeno disuelto acumulado durante la crianza conlleva las ventajas de la oxigenación controlada:

  • Respeto de los aromas del vino.


  • Mantenimiento del potencial de guarda.


  • Estabilidad microbiológica.


  • Eventualmente, al final del período de crianza se aplican oxigenaciones puntuales, también de forma controlada, para acabar de completar la estructura tánica del vino.

Fuentes:



LA MICRO-OXIGENACION
17:21 | Author: RICARDO G.
DEFINICIÓN DE LA MICRO-OXIGENACIÓN

La medición del oxígeno disuelto en los depósitos de conservación muestra, como ha sido frecuentemente descrito, que el oxígeno es consumido en el proceso. En efecto, encontramos generalmente mediciones de menos de 30ug/l. No obstante, ha sido más sorprendente constatar que no encontramos más oxígeno disuelto de media en las barricas que en los depósitos de otro tipo de materiales.

Esta observación ha conducido a definir la oxidación controlada como un aporte lento y continuo de oxígeno de manera que la velocidad de este aporte sea inferior a la velocidad de consumo del mismo no habiendo nunca acumulación de oxígeno disuelto.

La oxidación controlada se distingue del aporte violento de oxígeno (trasiego), por los efectos tan diferentes que ello supone. De esta manera, para una misma cantidad total de oxígeno con un aporte controlado se favorece la estabilización del color, la disminución del carácter vegetal y la desaparición del gusto a “reducido” a pesar de que el poder reductor ha aumentado. Por el contrario, el aporte violento favorece los fenómenos de evolución y de envejecimiento.

La microoxigenación es una herramienta de gestión de uno de los parámetros más importantes de la crianza: el dominio de los aportes de oxígeno al vino con todas sus consecuencias. De todas formas, es necesario, integrar debidamente esta herramienta en relación con los otros factores de crianza para alcanzar el equilibrio deseado en un producto definido.

Historia

Las experimentaciones de un viticultor inquieto

A principios de los años noventa, Patrick Ducournau y la familia Laplace, viticultores de la denominación francesa de Madiran, deciden interesarse en el dominio de los aportes de oxígeno en crianza. Enfrentados a un problema de crianza con los vinos de la variedad tannat, ricos y concentrados en taninos (hasta 7 g/L) y en antocianos (2 g/L contra los 0,6 que podemos encontrar en un tinto tipo Penedés o Rioja) al principio de la crianza, constataban siempre una sensación gustativa de sequedad en los vinos al final del envejecimiento. Iniciaron entonces la búsqueda de una técnica de crianza adecuada para conservar la grasa y la fruta de sus vinos, ya fuesen criados en barrica o en depósitos.

Los primeros ensayos de aportes de oxígeno constantes y controlados, en 1991, mostraron rápidamente sus beneficios en relación con los trasiegos o la ausencia de oxígeno: los vinos evolucionaban mejor y, aún algo sorprendente para la época, parecían evolucionar más lentamente. Donde los vinos perdían color y ganaban sequedad en boca, ahora los aportes de oxígeno conservaban más el color, la frutosidad y, sobre todo, taninos más grasos y redondos.
Así nació la microoxigenación, concebida como herramienta de gestión y control de uno de los parámetros más importantes en la crianza de los vinos: el oxígeno. Lejos de lo que muchos piensan, no se trata de una tecnología para acelerar la crianza (estaríamos hablando de oxidación en vez de oxigenación), sino de una herramienta para conducirla y conseguir expresar todas las cualidades positivas del vino, corrigiendo algunas de negativas, y alargando su período de vida.

La validación científica

Con la financiación inicial de un proyecto ANVAR, con la tutela científica del INRA de Montpellier (Francia) en la persona de Michel Moutounet, la empresa Oenodev inició la investigación para probar científicamente su patente registrada en 1993. La investigación llevada a cabo ha demostrado la eficacia de los aportes controlados de oxígeno en la estabilización del color y el desarrollo de la estructura de los vinos, así como efectos positivos sobre la expresión aromática, eliminando caracteres herbáceos o vegetales y potenciando los caracteres afrutados varietales.
Hoy en día, la validación científica de la microoxigenación se basa esencialmente en ensayos que se practican en las propias bodegas. Durante el proceso, los vinos se siguen analítica y sensorialmente con el apoyo de grupos de jurados expertos, formados y entrenados regularmente para este tipo de análisis sensorial por un profesional (Maurice Chassin, del Instituto de Degustación de Tours, Francia). La combinación de ambas técnicas permite evaluar las cualidades de la composición fenólica del vino, que determinan directamente sus posibilidades y evolución.

Fuentes:

Claves para Catar un vino
16:42 | Author: RICARDO G.

Crisis de la crítica
3:05 | Author: RICARDO G.
¿Cómo debe ser la crítica de vinos? ¿Debe incluso existir una crítica de vinos 'tradicional', ahora que cualquier aficionado del mundo puede crear un blog y exponer sus opiniones báquicas al resto de la Humanidad en tiempo real y a coste cero? ¿Cuál es la ética de la crítica de vino? Varios incidentes recientes han puesto de actualidad estas cuestiones.

Los ayudantes de Robert Parker, Mark Squires y Jay Miller (éste, responsable desde hace tres años de España, Argentina y Chile, entre otras zonas), han sido criticados al saberse que aceptaban viajes pagados a lugares como Israel o Argentina. Miller, en particular, ha sido reprendido por Parker y algunos opinan que su continuidad pende de un hilo.

Su situación se ha complicado por un extraño incidente en el que dio diversas notas a vinos de la chilena Viu Manent que, al parecer, no eran vinos de calidad sino un mismo malbec mediocre en varias botellas, puesto ahí para fotografiarlas... Días más tarde, una sorprendente rebelión de 14 famosas bodegas alemanas (luego, otras 14 más) contra la guía Gault-Millau provocó la dimisión inmediata de uno de los más destacados bodegueros, Armin Diel, coautor desde 1993 de la conocida guía germana junto al periodista norteamericano Joel Payne.

La causa oficial de esa rebelión fue que la casa editorial pidió 200 euros opcionales a quienes quisieran más guías y una placa, sin que ello afectara para nada a la cobertura de vinos ni a las calificaciones. Fue, pues, más bien una coartada para aparentemente zanjar viejas rencillas con Diel. Pero como los rebeldes son famosísimos, como Helmut Dönnhoff o Egon Müller, y siempre con notas altísimas, se entiende mal.

Uno de ellos, Knipser, es la 'bodega del año' en la última Gault-Millau y lo señala orgullosamente en su página de internet. Con estos motivos se ha lanzado toda una campaña a favor de las catas a ciegas, que no es lo que hacen Parker, Miller, Squires ni los de la 'Gault-Millau'. Pero también han contraatacado los defensores de catas abiertas, como el respetado importador Terry Theise, quien señala que para juzgar las posibilidades de envejecimiento de un vino es útil hacerlo a etiqueta descubierta, porque se conoce la manera de trabajar de cada casa. La cata a ciegas, señala Theise, favorece a los vinos más amables de jóvenes, y puede dejar en mal lugar a grandes vinos con gran capacidad de desarrollo.

Fuente: El mundo (España)
El profesor del departamento de Biología Molecular e Ingeniería Bioquímica de la Universidad Pablo de Olavide e investigador del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo (CABD), José Ignacio Ibeas, aseguró hoy en Carmona, en el marco del Curso de Verano de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) 'Cocina en Andalucía. Del terruño a la espuma. Productos locales y creatividad culinaria', que "lo innovador en el proceso de fermentación y elaboración de los vinos sería usar levaduras de su propia región de origen".

El profesor de la UPO, que impartió una conferencia sobre los 'Productos fermentados en Andalucía', explicó que la mayoría de los vinos utilizan en su proceso de fermentación levaduras aisladas en países como Holanda o Sudáfrica, ya que allí se venden de forma industrial y resultan más económicas. En palabras de Ibeas, las levaduras también tendrían que tener Denominación de Origen y "si se quiere elaborar un vino de Jerez no se deberían usar levaduras aisladas en otras regiones".

Al respecto, el experto señaló que cada vez más se tiende, en el caso del vino, a que cada región use las propias levaduras de su zona. Concretamente, "nuestros trabajos de investigación se están centrando en las bodegas de Jerez, Bormujo y en Mollina. Aquí estamos aislando levaduras para introducirlas en productos autóctonos".

Por otra parte, el investigador del CABD destacó que en los últimos tiempos hay un interés mayor por mejorar el proceso de fermentación de los productos, ya que este método permite "ampliar la dieta a través del desarrollo de una diversidad de sabores, aromas y texturas en los alimentos; preservar los alimentos mediante la producción de ácido láctico, etanol, ácido acético; y enriquecer los substratos alimenticios con proteínas, aminoácidos, ácidos grasos esenciales, vitaminas".

Asimismo, en el ámbito de los vegetales, la fermentación ayuda a la conservación del producto, al desarrollo de propiedades sensoriales características, a la destrucción de toxinas --como en el caso de la yuca-- o a mejorar la digestibilidad del vegetal --como en los altramuces--. Por ello, como indicó Ibeas, esta técnica se está incorporando también en la elaboración de nuevos productos como los yogures de soja y quesos tipo Camembert de soja.

Fuente: noticiasdelvino
La Fundación y la Universidad Politécnica de Salamanca trabajan conjuntamente en un proyecto de investigación sobre “Selección y caracterización de las levaduras vínicas autóctonas a partir de mostos y vinos de la Denominación de Origen Toro”. Esta investigación pretende conocer el efecto que tienen las levaduras en los vinos de la región y concretamente en los caldos adscritos a la Denominación de Origen Toro, poniendo especial atención a la levadura como elemento diferenciador de los vinos toresanos.

El presidente de la Fundación Vinos de Zamora, Manuel Fariña, asegura que este estudio pretende “diferenciar las levaduras que provocan la fermentación y darle a los vinos de Toro un carácter autóctono y único porque queremos encontrar una levadura que diferencia a los vinos de Toro del resto de caldos”. Este estudio tendrá una duración de cuatro años y está siendo llevado a cabo por las investigadoras Isabel Revilla Martín y Nieves Rodríguez, ambas profesoras de la Universidad Politécnica de Salamanca.

El proyecto, pionero puesto que no se ha realizado antes, se va a llevar a cabo en dos fases en una etapa inicial la profesora Rodríguez, intentará aislar varias cepas de levadura. “Se utilizarán métodos moleculares para aislar las diferentes cepas que puedan repercutir en los vinos”, asegura Rodríguez.

En una segunda fase, la investigadora Revilla estudiará las características de las levaduras aisladas, realizando un análisis sensorial para elegir las tres con mejores características para poder utilizarlas en la fermentación. Según Revilla cuando las levaduras se rompen “desprenden monoproteínas que van a influir en el cuerpo del vino, con las tres levaduras que tengan mejores características realizaremos microfermentaciones de unos 15 litros con la cosecha de este año para ver si realmente influyen en la calidad”.

El proyecto, en un principio, se va a llevar a cabo con los vinos de la Denominación de Origen Toro pero posteriormente también se realizará con los caldos adscritos a Benavente y Valles.

Fuente: Agrocope.com
Pisco peruano gana premio en Francia
8:38 | Author: RICARDO G.
En el prestigioso concurso "Les Citadelles du Vin" realizado como es tradicional en Francia, el Pisco peruano Demonio de Los Andes obtuvo el "Trofeo Prestigio". "Les Citadelles du Vin" cuenta con el auspicio de la OIV. El pisco peruano distinguido es producido por Viña Tacama.

El pisco peruano Demonio de los Andes Acholado (ampliar foto) fue premiado en el Concurso Internacional Anual de Vinos y Espirituosos denominado Les Citadelles du Vin, que cuenta con el patrocinio de la Organización Internacional de la Vid y del Vino (OIV), que se desarrolló en Francia.

En esta oportunidad, el pisco elaborado por Viña Tacama accedió a los honores del “Trofeo Prestigio”, una recompensa de fama mundial que brinda Les Citadelles du Vin, uno de los concursos más importantes y de mayor credibilidad en el mundo y que, con el paso del tiempo, se ha vuelto en uno de los eventos ineludibles de la escena vitivinícola mundial.Cada año, los resultados del concurso se editan en forma de un folleto denominado “Palmarés del los Vinos del Mundo” con el fin de incluir en un repertorio los productos premiados y promover los vinos y espirituosos del mundo de calidad. Esta obra se distribuye entre todos las partes implicadas del sector del vino (patronales, compradores, distribuidores, especialistas en la venta de vino, prensa vitivinícola, productores, etc.) y al público en general previa solicitud.Las bebidas en competición, incluyendo el pisco Demonio de los Andes Acholado, fueron evaluadas con precisión, todas las muestras fueron “anónimas” y clasificadas por categorías.

En una rigurosa cata a ciegas cada producto se evaluó siguiendo criterios estrictos y precisos: tipo aromático, potencia, limpidez, evolución. En la edición 2009 de la exigente competición del Les Citadelles du Vin, creado en 1992, los expertos catadores internacionales, enólogos de alto nivel reconocidos por la OIV, provenientes de los cinco continentes, juzgaron a ciegas 1,500 vinos del mundo y bebidas espirituosas, con un objetivo prioritario: presentar a los compradores de todos los confines del mundo una selección de productos que corresponda con las expectativas del mercado.La dimensión internacional del evento es omnipresente ya que el 70% de los productos inscritos fueron vinos extranjeros. En total, participaron en el concurso cerca de 30 naciones y la representación de más de 300 denominaciones de origen .

Fuente: Perú.com.
Cómo convertir el vino en agua
13:15 | Author: RICARDO G.
Poco más de un año después de su puesta en funcionamiento, la Fundación Emilio Moro presentó su primer proyecto humanitario al presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera.

El presidente de la Fundación, José Moro, y el director de la misma, David Espinar, explicaron los detalles de esta actuación, que tendrá lugar en una de las provincias más necesitadas de agua potable en Sri Lanka, y que acaba de ser suscrita a través de un convenio de colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

Este proyecto pretende dotar de agua potable y saneamientos a las zonas más desasistidas del planeta. La iniciativa constará de varias fases a lo largo de dos años de duración, y contará con dos acciones principales. En primer lugar, se restaurará el cauce de un río en el valle Lipton, al que van a parar cantidades notables de productos químicos, consecuencia de las tres grandes plantaciones de té que existen en la zona.

El casi inexistente tratamiento de deshechos y la falta casi total de vegetación en las riberas facilitan que se produzcan esas aportaciones de materiales y aguas residuales en la corriente fluvial, lo que repercute negativamente en la salud humana. Mediante la plantación de una cubierta forestal sostenible, se mitigarán esos efectos dañinos.

A través del comité provincial del agua y en colaboración con el programa Art Gold de Naciones Unidas, la aportación de la Fundación Emilio Moro también afrontará otra actuación para mejorar las condiciones de vida de las personas que pueblan esos distritos. En este caso, se diseñará un plan de ubicación de pozos que alcancen la máxima productividad en términos de agua, alimento, energía o habitabilidad. En torno a la red de pozos y de cada uno de ellos se plantará una valla viva de vegetación que los preserve de los efectos del viento, la luz solar y la entrada de residuos arrastrados por el agua de lluvia.

Fuente: Diario El Mundo España
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